CULTURA

NO ESTÁ MUERTO QUIEN PELEA

El tan venerado como resistido director Zack Snyder vuelve al mundo de los muertos vivientes de la mano de Netflix. Su nueva película El Ejército de los Muertos (Army of the Dead, 2021) será la piedra angular de todo un universo de zombies que llega para copar el streaming.

Por Cristian Calavia
30/05/21

Fue un tal Scott Stuber quien convenció a Universal Pictures de que pusiera fichas en un joven realizador de Wisconsin cuya experiencia hasta ese momento consistía en algunos cortos documentales y videoclips de artistas como Morrisey y Rod Stewart. El proyecto con el que decidieron darle una oportunidad fue El Amanecer de los Muertos (Dawn of the Dead, 2004), una nueva versión del film que George A. Romero había hecho en 1978. A pesar de que el guión de James Gunn presentaba varios cambios respecto del original, la ópera prima de Zack Snyder fue recibida con entusiasmo por parte del público y la crítica.

Diecisiete años más tarde, Stuber, ahora jefe del área de películas originales de Netflix, volvió a convocar a Snyder para llevar a cabo El Ejército de los Muertos (Army of the Dead, 2021) ofreciéndole la nada despreciable suma de 90 millones de dólares de presupuesto. La intención de la compañía y del director era encarar una de las producciones más grandes que se hayan hecho dentro del subgénero de cine de zombies, sólo comparable por escala a títulos como Soy Leyenda (I Am Legend, 2007) o Guerra Mundial Z (World War Z, 2013). Al principio iba a tratarse de una secuela directa de la remake de 2004, pero esa idea quedó flotando en el aire sin que a nadie le importara demasiado.

La historia trata sobre un grupo paramilitar liderado por Scott Ward (Dave Bautista) que es contratado por un sospechoso hombre de negocios llamado Bly Tanaka (Hiroyuki “Scorpion” Sanada) para robar la bóveda de un casino de Las Vegas que contiene 200 millones de dólares. La tarea debería ser sencilla para este grupo de soldados armados hasta los dientes. El problema es que la ciudad fue declarada en cuarentena luego de haber sido afectada por una epidemia que transformó a la población en una horda de muertos vivientes. Como frutilla del postre, el gobierno norteamericano decidió poner fin al problema lanzando una bomba nuclear en la zona, dejándoles sólo 32 horas para completar la misión suicida.

Una vez adentro descubrirán que existen distintos tipos de zombies: algunos lentos y cuya única motivación es la carne humana y otros más rápidos, fuertes y organizados. Un concepto similar al que usó George A. Romero en su Tierra de los Muertos (Land of the Dead, 2005), en la que los difuntos tienen un líder con consciencia propia. En la nueva película de Snyder existe un alfa que lleva la batuta interpretado por Richard Cetrone –tuvo un rol similar en Fantasmas de Martes (Ghosts From Mars, 2001) de John Carpenter-, pero que se parece más a un vampiro de la saga Inframundo (Underworld, 2003-2017) que a un muerto vivo tal como ha mostrado la gran pantalla históricamente.

Otro rasgo del subgénero que se encuentra diluido en esta producción original de Netflix es la crítica social a través de la analogía, tal como ocurre, por ejemplo, en La Noche de los Muertos Vivos (Night of the Living Dead, 1968) con la Guerra de Vietnam o en su secuela con la sociedad de consumo. En el film de Snyder esto sucede de manera casual y prescindible. Hay un muro que divide el mundo de los vivos y de los muertos, refugiados que son violentados por las autoridades y estratos sociales desiguales de ambos lados; nada de eso se desarrolla demasiado ni tiene un peso sustancial en la trama. De hecho, la película fue filmada antes de la pandemia del coronavirus así que todas las similitudes que se puedan llegar a encontrar al respecto son obra y gracia de la casualidad.

Cabe destacar que la mayoría de los personajes de El Ejército de los Muertos cumplen con lo que se precisa de ellos en una historia de esta naturaleza: al primer cuarto de hora ya queda claro quién es quién, qué motivaciones tienen y cuáles seguramente terminarán peor que otros. Uno de ellos es Ludwig Dieter (Matthias Schweighöfer), una de las personas menos idóneas para sobrevivir a una situación así pero que, al mismo tiempo, es el único capaz de abrir la bóveda. Esto hará que el grupo deba protegerlo como sea, algo que no será nada fácil. Por otro lado, el comic relief artífice de gran parte del humor que funciona en la película es Marianne Peters, la piloto interpretada por la comediante Tig Notaro. Este rol lo había ocupado originalmente el cómico Chris D’Elia, pero decidieron reemplazaron en post-producción luego de que el actor fuera acusado de acoso sexual.

El Ejército de los Muertos es una película de Snyder de pura cepa con toda la vehemencia, exageración y cámara lenta que eso implica. Una propuesta entretenida, por momentos divertida, que se aleja de las características primordiales del cine de zombies para hacer foco en grandes secuencias de acción y primeros planos de decapitaciones, fracturas expuestas y desentrañamientos. Sin sutilezas y fiel al estilo de su director: 148 minutos que no escatiman en sangre, tiros, tripa y corazón. Así como alguna vez hizo Warner Bross muchos años atrás, ahora es Netflix la compañía que decide darle a Snyder una inusitada libertad creativa para que haga de las suyas. Por ahora, luego de este primer paso, el crédito sigue abierto.

TO BE CONTINUED…

A medida que el rodaje iba avanzando, Snyder y sus colaboradores se dieron cuenta del potencial que tenía el personaje de Ludwig Dieter y en el mismo set surgió la idea de contar la historia sobre cómo este experto usurpador de bóvedas llega de su Alemania natal para terminar enfrentando zombies en Las Vegas. Matthias Schweighöfer, el actor que lo interpreta, es una estrella en ascenso en la tierra de las salchichas y el infame Mario Gotze y no sólo protagonizará esta precuela, sino que también la dirigirá. Con chances de ser estrenada en el último tramo del año, contará con la actuación de la británica Nathalie Emmanuel, reconocida por su trabajo como Missandei en Juego de Tronos (Game of Thrones, 2013-2019) y las últimas entregas de la saga Rápido y Furioso (The Fast and the Furious, 2001-).

La extensión de este universo no se detiene acá y Netflix ya está preparando un spin off en formato animé de la película que llegó a la plataforma el 21 de mayo pasado. Army of the Dead: Lost in Vegas llegará al streaming en el 2022, significará el regreso de Dave Bautista, Ella Purnell, Ana de la Reguera, Tig Notaro y Omari Hardwick en sus roles originales y sumará las voces de viejos colaboradores del director como Joe Manganiello, Christian Slater, Vanessa Hudgens y Jena Malone. Además, el proyecto estará a cargo de Jay Oliva, guionista, productor y director de gran parte del universo animado de DC Comics en la última década.